Capítulo 15

Cuando Baltasar despertó, la cama del hospital estaba rodeada de gente. Armando estaba al frente; al ver que Baltasar mostraba señales de conciencia, rápidamente ordenó a sus hombres que llamaran al médico. Los ojos de Baltasar parecían estar oprimidos por algo, tan pesados que no podía abrirlos. Su garganta estaba seca y áspera, sus labios temblaban como si intentara hablar. Armando acercó su oído y solo escuchó que repetía una y otra vez el nombre de una persona: "Antonia"... La cara de Armando se endureció al instante. De repente, no supo cómo enfrentarse a Baltasar ahora que estaba despierto. No pasó mucho tiempo después de la llegada del médico cuando Baltasar finalmente abrió los ojos. Su mirada atravesó al médico, sin importarle la gravedad de sus heridas; solo se empeñó en buscar a Armando con la vista. Armando bajó los ojos y apretó los labios. —Baltasar, lo siento, la buscamos por todas partes y también iniciamos una investigación, pero no hay ninguna noticia de Antonia. —Es