Capítulo 98

Catalina observó con atención las expresiones de ambos y preguntó con desconfianza: —¿Qué asunto relacionado conmigo? —Aunque llevamos tres años casados, no te conozco tan bien como el señor Pedro —dijo Alejandro, con una mirada cargada de una intención difícil de descifrar. —Por eso quiero preguntarle a él algunas cosas sobre tu vida. Quiero conocerte mejor. La relación entre Pedro y Catalina, que se conocían desde la infancia, no podía compararse con un matrimonio de apenas tres años. Las palabras de Alejandro despertaron en Josefina una mezcla de admiración y culpa. Admiración hacia Alejandro. Y culpa hacia Pedro. Contarle a tu rival todo sobre la persona que te gusta... ¿no es eso como clavarle un puñal directo al corazón? Josefina se apresuró a decir: —Ya es tarde y estoy algo cansada. Mejor volvamos a casa. Pedro no podía mostrar ninguna emoción frente a Josefina, así que simplemente le sonrió mientras se despedía de ella. Cuando se acercaron al auto, Catalina se disponía a senta