Capítulo 52 Solo tuviste una hermana.

Almira, al recibir mis palabras llenas de ira, enmudeció, estaba bastante tensa, pero no se atrevió a decir en ese momento ni una palabra más. Solo me miró con tristeza, buscando apoyo en Tadeo. —Tadeo, yo en verdad te luro que no lo hice. Todo lo que he hecho ha sido por el bien de mi hermana... Tadeo volvió a defenderla, mirándome con evidente desprecio. —Conozco muy bien a Almi como a nadie. Ella solo temía que tus acciones imprudentes perjudicaran la reputación de la familia. ¡Pero tú, en lugar de ser agradecida, solo la atacaste con palabras crueles! ¡Serafina, no seas tan cruel carajo! Me eché a reír. —Eso de si soy cruel o no, es algo discutible. Saqué mi celular y mostré un video en el que Almira conversaba a susurros con un médico. Y lo más evidente de todo esto era que, su muñeca no tenía ningún tipo de lesión. Mis padres se quedaron completamente sorprendidos. —¿Qué... qué es lo que está pasando aquí? Almi, ¿tu muñeca...? Almira, visiblemente nerviosa, se cubrió la muñeca,