Capítulo 389

"Espera...". Catherine lo detuvo de repente, agarrándolo de la mano. "¿Qué?". Hace tiempo que ella no tomaba la iniciativa de detenerlo así. El apuesto rostro de Shaun tenía una sonrisa burlona. "¿No soportas verme yéndome?". Catherine se mordió los labios y le levantó la manga de su mano izquierda, para ver su brazo envuelto en vendas. Él estaba... ¿realmente herido? "Es una pequeña herida". Una mirada poco natural brilló en los ojos de Shaun, y él inmediatamente retiró el brazo. "¿Cómo te has herido?". Catherine lo miró fijamente. Si solo era una pequeña herida, ¿por qué estaba temblando de dolor con sólo un ligero toque? "¿Estás preocupada por mí?". Shaun curvó los labios con una sonrisa. Su voz profunda estaba llena de alegría. "¿Te duele el corazón por mí?". "...Vete". Catherine se molestó por la vergüenza. Creía que él se preocupaba por ella, pero... era porque seguía siendo su esposo en papel. Shaun sonrió afectuosamente y fue al baño. Dentro, su bello rostro fue reemplazado por una oleada de dolor. Se quitó la gasa capa a capa. En el interior, la herida había formado costras rojas y brillantes, y las furiosas líneas rojas tenían un aspecto aterrador. Permaneció allí durante seis o siete minutos. Entonces, su teléfono móvil sonó afuera. Catherine miró el teléfono sobre la cama y dijo: "Te llama tu madre". Shaun contestó el teléfono frente a ella, e inmediatamente sonó la fría voz de Lea. "¿Estás libre? Vamos a comer juntos como madre e hijo". "Tch, ¿no habíamos ya cortado nuestros lazos como madre e hijo? Tú misma lo dijiste". Lea espetó: "Shaun Hill, no vayas tan lejos. Yo fui quien te dio a luz". "Sí, me diste a luz, pero no asumiste la responsabilidad de criarme. Eres una buena madre". Shaun se burló. "Sé lo que quieres que haga. No iré". "Tú...". Lea aspiró con frialdad. "Bien, si no estás de acuerdo, entonces no me culpes por ir por Catherine Jones. ¿Crees que se asustará si le hablo de tu enfermedad pasada?". "...". La cara de Shaun se volvió repentinamente lívida. "Shaun, el mayor temor de las personas son sus debilidades, y tú has expuesto tu debilidad ahora", dijo Lea cada palabra con claridad. "No me provoques". "Te arrepentirás de esto". Shaun colgó. Catherine lo miró. Su intuición le decía que algo lo había provocado. Sus ojos estaban enrojecidos, como si fuera a estallar en cualquier momento. Para ser sincera, le daba miedo esa expresión. Sin embargo, sabía que su madre debió haber dicho algo muy desagradable. Como espectadora, ella pudo ver que Lea Hill era realmente cruel. ¿Qué madre sería tan despiadada con su hijo? "¿Qué pasó?". Ella extendió la mano para sostener la mano de él. Estaba muy fría, lo suficientemente fría como para que ella se sintiera un poco desconsolada. "No es nada. Voy a salir". Shaun se frotó la cabeza y se dio la vuelta para irse. *** A las cuatro de la tarde, Chester fue a visitarla. "¿Ha mejorado tu apetito?". "No puedo comer demasiado, o me dolerá el estómago", le respondió Catherine con una expresión seria. "Tómatelo con calma. Come menos, pero más a menudo. Deberías poder salir del hospital pasado mañana. En cuanto a tu cara... ven cada dos días para que te la traten...". "Doctor Jewell, ¿sabe cómo se lesionó Shaun el brazo?". Catherine lo miró de repente. Chester se detuvo un momento, limpiando sus gafas. "¿Qué te dijo Shaun?". "No me ha dicho nada".