Capítulo 390

"Ya que él no te habló de ello, tampoco me corresponde a mí decir nada". Chester sonrió amablemente. "No tienes que pensar demasiado. Solo tienes que saber que te quiere". Así que todos sabían que él la quería. Catherine bajó lentamente los ojos. Sin embargo, de alguna manera, había un mal presentimiento en su corazón que no podía disipar. "Pero quiero saber quién le hizo daño. Me preocupa que haya enfadado a la familia Hill por mi culpa...". "Shaun no es una persona sencilla, así que la familia Hill no puede hacerle nada. No te preocupes. Ahora mismo, solo tú puedes hacerle daño". Cuando Chester se dirigió a la puerta, se dio la vuelta y le sonrió. "También has empezado a preocuparte por Shaun. ¿Significa eso que estás dispuesta a perdonarlo?". Catherine se quedó pensativa durante unos segundos, y sus mejillas se calentaron inconscientemente. Chester se rio. "Por favor, quédate con él. Shaun es un poco gruñón, pero eso tiene que ver con su educación. Como puedes ver, la mayoría de la gente de las familias ricas son egoístas y sólo piensan en sus propios intereses. En realidad, Shaun es bastante lamentable". Cuando se marchó, la frase ‘Shaun es bastante lamentable’ resonó en la mente de Catherine durante mucho tiempo. ¿Quién iba a pensar que el hombre más rico de Australia sería descrito como lamentable? Sin embargo, cuando pensó en que estaba aislado y fue abandonado por todos los miembros de la familia Hill, su corazón no pudo evitar el dolor. En ese momento, entró la Tía Yasmine y preguntó: "Joven Señora, ¿puedo prepararle una avena para la cena de hoy?". Catherine asintió con la cabeza y añadió un momento después: "Haz también un poco de sopa de pollo y añádele algunas hierbas". La Tía Yasmine se mostró dudosa. "Pero el médico dijo que su estómago no podrá digerir el tónico en este momento..." "...No, es para ti y Shaun". Catherine se apresuró a mirar su teléfono para esconder su vergüenza. La Tía Yasmine frunció los labios y sonrió. Hace tiempo que se había dado cuenta del afecto que se profesaban estas dos personas. Ahora que la Joven Señora estaba finalmente dispuesta a preocuparse por el Primer Joven Amo, esperaba que sus días siguieran mejorando. "Por supuesto, haré algo, pero Joven Señora, le diré al Joven Amo que usted fue quien me pidió que lo hiciera. Si no, no lo aceptará. Como puede ver, no suele estar muy dispuesto a comer mi comida". Catherine se mordió el labio. Si él se enteraba, se alegraría mucho de saber que ella volvía a preocuparse por él. No quería ver su mirada de orgullo tan pronto. "No tienes que avergonzarte. La salud del Primer Joven Amo es más importante. No ha comido algo nutritivo durante mucho tiempo, y es demasiado quisquilloso con la comida". La Tía Yasmine suspiró. Catherine pensó en su herida y asintió con impotencia. Por la noche, Shaun vino a cenar. Cuando la Tía Yasmine sacó la comida, ella sonrió débilmente. "Esta es la sopa de pollo que la Joven Señora me pidió especialmente que preparara para usted". A Shaun se le iluminaron los ojos y miró a Catherine, pero ella se apresuró a bajar la cabeza para comer y evitar encontrarse con sus ojos. Sin embargo, las puntas de sus orejas ya estaban enrojecidas. "Bueno, ya que fue especialmente arreglado por mi esposa, tengo que comerlo". Shaun dejó escapar una sonrisa cariñosa. Se bebió el gran plato de sopa hasta que no quedó nada. Incluso se terminó todas las sobras. La Tía Yasmine estaba gratamente sorprendida. "La Joven Señora tiene que dar la palabra. Nunca he visto al Joven Amo comer tantos platos". Catherine se quedó sin palabras. Él no comía poco cuando estaba en Melbourne, pero tenía tantos malos hábitos cuando volvió a Canberra. "No puedo evitarlo. Ya que la señora habló, tengo que escuchar obedientemente, o podría no dejarme ir a la cama por la noche". Una sonrisa de satisfacción apareció en el rostro de Shaun. Catherine no pudo soportar escucharlo por la vergüenza y le dio una patada con saña. "Golpear es una señal de afecto, maldecir es una señal de amor". Shaun levantó sus hermosas cejas. Parecía no temerle a las consecuencias. Catherine estaba completamente indefensa ante él y solo podía comer su cena en silencio. A las nueve y media de la noche, Catherine estaba lista para apagar las luces para dormir, pero Shaun se quitó de repente la ropa y se subió rápidamente a su cama. "Shaun Hill, vete...". Habían estado durmiendo en camas separadas desde que Catherine fue hospitalizada, así que ella lo apartó de una patada, ya que no estaba acostumbrada. "Ouch, me duele". Shaun puso una expresión de dolor. "Deja de actuar. Tu pierna no está herida". Catherine le espetó. "¿Intentas romperme la pierna?". Shaun la miró con amargura. "...".