Capítulo 1171

Antonia se dio cuenta de que había usado demasiada fuerza y rápidamente la retiró; todo su cuerpo empezó a temblar. —Mi esposo tuvo un accidente hace siete años. Desapareció durante un año y luego regresó, pero estoy convencida de que quien volvió ya no era mi esposo. Hace mucho tiempo empecé a sospechar que Salvador no era mi hijo, así que en ese momento pensé que esos dos podían conocerse. Nadie quiso creerme. Mi estado mental comenzó a deteriorarse, pero seguí guardando este secreto. Ahora que tú has descubierto la verdad sobre el falso Salvador, temo que Adriel le haga daño a mi padre, por eso vine a buscarte. Lorena, te lo ruego, ayúdame. Mientras hablaba, Antonia se arrodilló de repente en el suelo. Lorena se asustó y enseguida trató de levantarla. Antonia se negó a ponerse de pie, hablando de manera incoherente: —He aguantado durante tantos años sin saber cuándo actuarían. Cuando me acuesto a su lado, mi cuerpo se enfría y, aun así, debo soportar que me toque, soportar el hecho