Capítulo 148
En ese momento, Lorena tenía un sueño tremendo. Bajo el efecto del alcohol, apenas podía mantenerse despierta, y las palabras de Josefina le llegaban como un ruido lejano.
El auto se detuvo frente a su edificio.
Josefina la ayudó a bajar del coche, y tras dar unos pasos, se toparon con Yago, que los esperaba frente a la entrada del complejo residencial.
A sus pies había una montaña de colillas. La conocía, aunque no demasiado.
Josefina, con respeto, saludó: —Señor Yago.
Él frunció el ceño al ver a Lorena ebria: —¿Está borracha?
—Sí.
Inmediatamente tiró su cigarro y se acercó apresurado.
—Yo la llevo, puedes irte.
Josefina abrió la boca, pero obedeció. Le entregó a Lorena sin protestar.
Mientras observaba a Yago llevársela, sacó su celular y tomó una foto, que publicó en Instagram.
[Dando vueltas por la vida... Quienes deben estar juntos, siempre acaban juntos.]
Tras la publicación, volvió a su auto.
Yago llevó a Lorena hasta la puerta de su departamento. Estaba por tomar su mano para d

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil