Capítulo 25
—Mmm...
—Silvio, hoy ya hablé con Esther. Ella también está considerando darte una oportunidad.
—Eh...
Al oír esto, Silvio no pudo evitar sentirse secretamente aliviado.
Esa Esther...
Al parecer, ya había empezado a sentir algo de afecto por él.
Tal vez fue por su abrazo firme, o tal vez por aquellos besos apasionados y algo experimentados, que le hicieron sentir una clase de placer diferente.
—Pero... Necesita algo de tiempo para ajustarse. Es decir, todavía se siente un poco tímida...
Mientras hablaba, Liliana no pudo evitar soltar una risita.
—No te preocupes, Silvio. Cuando se sienta lista, irá a buscarte.
—Ah...
Esa Esther, de verdad que era especial.
¡Ni siquiera se atrevía a ver a su propio esposo! ¿No estaba siendo demasiado tímida?
Pero...
¡Cuando la besé, su reacción fue bastante buena!
Ese cuerpo suave, su respiración acelerada, esos labios entreabiertos como pétalos de cerezo... Todo mostraba claramente que ya lo había aceptado en su corazón.
Si ya habíamos llegado hasta es

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil