Capítulo 48

Norma, al darse cuenta, no insistió y cambió de tema, preguntando por la fiesta de celebración. Al mencionarlo, Tomás recordó lo del vestido y dijo que ya lo había encargado con anticipación. —¿De verdad? ¿Dónde está? ¡Quiero verlo! —Norma estaba llena de expectación. Tomás respondió de manera instintiva: —Le pedí a la secretaria Lucía que lo recogiera. Tras una breve pausa, añadió: —Pero ya salió del trabajo. —Voy a preguntarle a Viviana, debería saber dónde está. —Norma tenía mucha prisa por ver el vestido. Tomás asintió. Antes de irse, Norma vio a Tomás guardar la carta de renuncia de Lucía en el cajón de la derecha. Si no lo había visto mal, dentro había varias cartas de renuncia más. Es decir, Lucía ya le había presentado su renuncia a Tomás hacía tiempo, solo que él no la había aprobado. Este descubrimiento hizo que Norma sintiera cierta incomodidad y un leve sentido de amenaza. Ahora no estaba segura de si Tomás no aceptaba la renuncia de Lucía porque no quería prescindir de ell