Capítulo 58

Qué aburrido. Si Javier quiere llevar consigo el certificado de matrimonio, que lo lleve. Verlo desaparecer también era una experiencia interesante. Cuando llegaron a Casa Rodríguez, el lugar ya estaba lleno de autos lujosos, aunque Patricia había reservado amablemente un espacio para ellos. Apenas Carmen salió del carro, Javier rápidamente caminó hacia ella y le extendió el brazo, indicándole que lo tomara. Carmen lo ignoró completamente y siguió caminando hacia adelante. —Señora Gómez. Javier la alcanzó y colocó su mano directamente sobre su cintura, y al sentir su resistencia, la aprisionó firmemente en sus brazos. —Habíamos acordado comportarnos bien delante de Patricia, ¿por qué estás de mal humor otra vez? ¿Es que quieres que Patricia note algo y que todos centren su atención en ti? ¡Ella no quería ser así! Solo no quería estar tan cerca de Javier. Sin embargo, pensando en las especulaciones y críticas que podrían surgir si entraban por separado al evento, decidió soportar y to