Capítulo 96

Él llegó desde otro ascensor y solo alcanzó a oír la última pregunta del hombre, seguida por el sonido de la puerta al cerrarse. Con la cara sombría, estaba a punto de llamar cuando, justo en ese instante, sonó su teléfono. Era Lilia quien llamaba, y por primera vez no tenía ganas de contestar. Recordó que, por la tarde, al ir a Nébula Entertainment a preguntar por qué habían cambiado de opinión tan de repente, no había podido ver al responsable y, por eso, había dejado a Lilia allí esperando. Que lo llamara ahora... ¿Sería porque lo había visto? Al descolgar, la voz de Lilia sonó llena de sorpresa y alegría. —Melchor, conseguí ver al responsable, pero mañana tiene que viajar y solo esta noche puede hablar conmigo. Reservé un restaurante, ya está aquí esperándonos, ven enseguida. Él alzó la vista hacia la dirección de la habitación de Carolina, la mirada oscura y peligrosa; dudó un instante y luego se dio la vuelta para marcharse. Se consolaba pensando que Carolina y Bruno siempre habí