Capítulo 118
Ángeles: "......"
Resulta que en el mundo realmente existen personas que no buscan la belleza... No, ¡la jefa es en sí misma muy bella!
—Jefa, al menos podrías colaborar un poco, fingir que sufres con nosotros,— sugirió Ángeles.
—No tengo tiempo.— Ana dejó su mochila, tomó una pequeña bolsa de lona y se marchó.
El líder de la clase y los demás: "......"
¿Acaso no se siente como si hubieran sido eclipsados por alguien distante y presumido?
Ana se dirigió hacia el edificio de laboratorios.
En la entrada del laboratorio de química en el cuarto piso.
Sergio, con su mochila al hombro, se apoyaba casualmente contra la pared, absorto en su libro mientras esperaba.
Este laboratorio de química es de uso exclusivo de los profesores y raramente se utiliza; en el pasillo, aparte de él, no había nadie más.
En ese momento, se escucharon pasos provenientes de la escalera.
Sergio alzó la mirada y vio una figura alta y esbelta acercándose con paso firme.
La joven, con el cabello

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