Capítulo 262
—Abuelo, no le hagas pasar un mal rato a Paz. Anda ya. —Jorge me defendió—. Yo pasé por lo mismo, y obviamente no se va a ir a ningún lado, así que más vale que te acostumbres, ¿no, Paz?
—Sí, lo que dijo —dije—. No vine a discutir contigo, vine a hablar. —Sonreí y saqué la bolsa de licor—. Incluso te traje una copa. Solo quiero hablar.
La mirada de Fabricio se posó en la bolsa que tenía en las manos. «No soy de los que rechazan un buen licor, y tengo curiosidad por saber qué clase de porquería saldrá de tu boca esta vez, así que ¿sabes qué? Deberíamos hablar».
—Sí, y me retiraré de esta situación —rió Jorge—. Diviértanse ustedes dos y no se maten.
Se hizo un silencio incómodo en cuanto Jorge se fue solo. Le di a Fabricio una gran sonrisa y supe que tenía que ganar la apuesta, pasara lo que pasara. "Puedes aguantar el licor o a tu nieta. Tú decides". Inicié la conversación.
Fabricio me ignoró y agarró a Siena. Se marchó y me dejó atrás, sobresaltada, mientras yo no sabía qué hacer. "¿Vi

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda