Capítulo 44 Ese dinero debía ser suyo, era lo que él le debía

Pero si no era la indemnización por fallecimiento, ¿cómo habría podido Julia reunir de golpe una suma tan grande? Diego recordó cómo Julia había estado destrozada de dolor cuando murieron sus padres. Y también recordó cómo él, por la falta de dinero, estaba consumido por la ansiedad. En el momento en que más ansiaba tener éxito, fue Julia quien sacó esa suma y le dijo: —Usa este dinero para cumplir tus ambiciones. —¿Cómo puedes tener tanto dinero? —En aquel entonces Diego le preguntó sorprendido. —Es lo que mis padres me dejaron —respondió Julia suavemente, y mientras miraba ese dinero, sus ojos se llenaban de tristeza. Pero en ese instante, Diego estaba embriagado de alegría y no notó la pena de Julia. Diego se acercó paso a paso hasta colocarse frente a Julia, y con voz ronca dijo: —¿Por qué no me dijiste entonces que era la... Indemnización por la muerte de tus padres? En ese momento, la pesadez en su pecho lo oprimía tanto que casi no podía respirar. —Porque en ese entonces no quer