Capítulo 26 Defender

—¿Qué clase de actitud es esa? ¿Así tratas a tus mayores? La cara de Patricia se ensombreció aún más.—¿Acaso dije algo que no fuera cierto? ¿Tu padre no es acaso...? —¿Y qué tiene que ver lo mío con mi padre? —Mariana la interrumpió de inmediato—. Además, ¿acaso la señorita Lucía no sabe perfectamente lo que pasó anoche? Desde que se casó con la familia Sánchez, Mariana siempre había mostrado una actitud respetuosa, dócil y obediente. Era la primera vez que los demás se encontraban con una mirada suya tan aguda y cortante. Lucía, al sentirla, tuvo un escalofrío que le recorrió la espalda y, sin querer, se encogió hacia su madre, Patricia. —¿Todavía tienes la cara de hablar de dignidad? ¿No fuiste tú quien anoche puso algo en la bebida de nuestra Luci? —dijo Patricia entre dientes. —¿Y las pruebas? —replicó Mariana. —¿Qué pruebas? ¡Si todo el mundo sabe que siempre has guardado rencor hacia nuestra Luci! Usaste un método tan sucio que tú... —O sea, que no tienen pruebas, ¿verdad? Volvió