Capítulo 49

Afuera, los truenos todavía retumbaban mientras Elena ya se había quedado dormida. Observando atento a la persona con respiración tranquila en la cama, Diego, sentado en una silla, no pudo evitar recordar los días en que Silvia, cada vez que tronaba, se escondía temerosa bajo las cobijas. Aunque estuviera caliente bajo las cobijas y estas no aislaran realmente el sonido, ella siempre se metía debajo; y aunque él la abrazara con fuerza para taparle los oídos, ella necesitaba tener una cobija sobre sí para sentirse segura. Con estos pensamientos, sacó de inmediato su celular y envió un mensaje a Carlitos: [¿Cómo está tu mamá?] En ese momento, Carlitos estaba haciendo una videollamada con Ana junto a Silvia. Desde la noche anterior hasta ahora, Ana no había respondido a los mensajes de Silvia, lo cual al principio no le preocupó demasiado, pensando que tal vez Ana había estado demasiado ocupada toda la noche y ahora estaba durmiendo, ya que esto solía suceder. Pero ya había pasado un día