Capítulo 22

Ángela, incapaz de soportarlo más, no dudó en cachetearla. —¡Susana, la que está difamando eres tú! Susana se cubrió la cara, aparentando indignación. —¿Ángela, te quedaste sin argumentos y por eso pierdes los estribos? Ángela soltó una risa cargada de ira. —Tú sabes muy bien si soy yo la que está furiosa o tú la que está nerviosa porque tiene la conciencia sucia. Susana, imperturbable, se volvió hacia Mateo. —Don Mateo, no estoy mintiendo. Ángela le ocultó a Rubén que mantenía una relación inapropiada con José y, además, quedó embarazada. —Rubén, por compasión, la perdonó y quiso que Ángela abortara, pero ella se negó. —Ella insistió en divorciarse para irse con José. ¡Ese es el verdadero motivo de las discusiones entre Rubén y ella! Dichas así, esas palabras parecían lógicas e incluso perfectamente coherentes. Los invitados se quedaron atónitos y comenzaron a murmurar entre ellos. —¡Vaya, esa Ángela sí que no tiene vergüenza! Primero se casó con Rubén drogándolo para entrar a la fami