Capítulo 104
—Si no estás conforme, también puedes traer a tu esposo y pelear con ellos —se burló Alonso.
Cuando se enteró de que Ximena se había casado, en realidad le sorprendió bastante.
En su momento, Alonso sentía bastante simpatía por Ximena.
Era una mujer hermosa, de carácter sereno y sosegado; siempre la consideró una persona con ideas propias y mucha profundidad. Pero, para su sorpresa, Ximena se casó de repente.
Y además, aceptó por voluntad propia regresar al hogar y convertirse en ama de casa.
Pasaba los días girando en torno al hombre y a la cocina.
¡Había caído completamente en la decadencia!
Desde entonces, empezó a despreciar a Ximena.
Resultó que, al final, ella era igual que todas esas otras mujeres.
¡En absoluto se podía comparar con Carmen, una mujer independiente, con gran capacidad, excelente formación y que no dependía de ningún hombre!
A Ximena no le importaba lo más mínimo la opinión de Alonso.
Aunque también le resultaba irónico.
¿Su antiguo esposo?
¿No era acaso el hombre

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