Capítulo 23

En ese instante, Gustavo presidía una reunión crucial del consejo directivo sobre la estrategia del grupo para los próximos diez años. Al escuchar el reporte de su asistente en voz baja, se levantó de golpe de su asiento, ¡con el rostro pálido como el papel! Ni siquiera tuvo tiempo de dar una sola explicación. Ante la mirada atónita de todos los directores, tembloroso dejó caer los documentos que tenía en las manos y se dio la vuelta para salir corriendo de la sala de reuniones. —¡Preparen el avión enseguida! ¡Lo más rápido posible! ¡A Niza! ¡No, al aeropuerto más cercano donde aún se pueda aterrizar! —Gritaba desesperado por celular mientras corría enloquecido hacia el ascensor, con una voz como nunca antes: llena de pánico y temor. —¡Contacten a todas las agencias de rescate locales! ¡Contraten al mejor equipo de rescate! ¡Cueste lo que cueste! ¡Yo voy personalmente! Toda su estrategia corporativa, todo su imperio empresarial, en el momento en que oyó que ella podía estar en peligro,