Capítulo 12

La situación de los padres de la familia Herrera también era un verdadero infierno. La policía había iniciado una investigación formal, acusándolos de múltiples delitos, incluidos control mental, fabricación de pruebas y detención ilegal. Las acciones de la compañía encadenaron caídas continuas, el valor de mercado se evaporó por completo, las cuentas bancarias fueron congeladas y los acreedores comenzaron a llegar uno tras otro. Intentaron escabullirse por la puerta trasera de la mansión, pero los periodistas, que ya los estaban esperando, los rodearon de inmediato. —Señor Rafael, ¿qué siente al haber empujado a su propia hija a la muerte? —Señora Gabriela, ¿se arrepiente de haber favorecido a Valeria desde pequeña? —¿Le pedirán disculpas a Sofía? Los flashes caían sobre ellos como instrumentos de tortura, desgarrando los últimos restos de su dignidad. Rafael, con la expresión descompuesta, se cubrió la cara con la mano y, escoltado por los guardias de seguridad, se metió en el auto d